miércoles, 9 de noviembre de 2011

Laberintos (I)

Hay árboles
como hay laberintos
donde crecen toros
y cosechan humanos.

Es dulce el laberinto,
más dulce que la bestia
con cuerpo pensante
y cabeza de instinto y pasión.

Árboles de corteza amarga,
hasta la raíz.
Ahora los toros roen,
para llegar a la savia.

Tragar instinto
y vomitar razón.
Alucinar con otros
y reír los dos.

Cuerpo de instinto
y cabeza de razón.
Será el amargo laberinto
similar a su amarga bestia

Los humanos crecen
y se cosechan toros.
Por que hay laberintos
como hay árboles.

viernes, 4 de noviembre de 2011

Blanca pared. (que no es blanca, pero se siente b l a n c a )

Me gusta el vacío de la noche
y aún el susurró de la lluvia.
La pared que no es blanca
me atormenta, a pesar de la verdad estar afuera.
El negro del techo y sus luces, son tapadas
con telarañas de lluvia, ¿o serán de lágrimas?

Las puertas se dibujan, si se quiere...













y la salida espera su voluntad
de abrazar a la lluvia
que espera fielmente al sonámbulo que no duerme por oír su susurro.